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Cuando la cultura de las relaciones permanece muy carente en un mundo que fomenta el individualismo y la incomprensión, el MEC de Cuba alza su voz para encontrar y llevar la paz en un mar de conflictos y puentes caídos. La paz en las relaciones intergeneracionales fue el tema del Taller Regional del MEC-C, realizado entre los día 2 y 3 de mayo en la hermosa ciudad del Yayabo, la cual se engalana para cumplir sus 500 años de fundada. Allí donde los murales te invitan a reflexionar, y la amabilidad de las personas no encuentra límites, se reunieron poco más de 20 jóvenes, de las provincias de Cienfuegos, Villa Clara y por supuesto anfitriones de la ciudad de Sancti Spíritus. El rencuentro siempre cargado de alegría llenó el espacio desde el día primero de mayo, cuando cada una de las delegaciones llegó a la iglesia presbiteriana de Sancti Spíritus la cual nos acogería como un seno maternal en esos días de alegrías y reflexiones.
Las jornadas de trabajo iniciaron el día 2 de mayo en la mañana, presentando a través de imágenes parte del quehacer reciente de los grupos locales del MEC-C, con el objetivo de ilustrar a quienes visitaban estos espacios por primera vez, sobre lo que somos y hacemos. Luego el salmo 122 salió de la voz de uno de los participantes, invitándonos a buscar y ofrecer la paz, “por amor de mis hermanos y de mis amigos diré ahora: sea la paz en ti” salmo 122:8, así nos saludamos con besos y abrazos y mirando justo a los ojos ofrecimos la paz. Acto seguido nuestra presidenta Dianet de La Caridad Martínez, ofició la apertura del taller con unas cálidas palabras de bienvenidas que fueron seguidas del canto “Edifiquemos Juntos”, con el que no invitó a caminar por el salón y compartir con otra persona lo que dejamos atrás, que esperamos de la cita, y para terminar el ejercicio a complementarnos con gestos pensados en las RIG.
Esto abrió las puertas para muy una muy querida dama, que iba a estar facilitando todo el encuentro, ella fue Kirenia Criado, pastora cuáquera coordinadora del socioteológico del de Centro Memorial Martin Luther King Jr. (CMMLK) por la que agradecemos y pedimos a Dios que continúe bendiciendo. Kirenia inició el trabajo con una breve charla introductoria, en las que nos mencionaba entre otras cosas como el salmo 122 era el único que pedía la paz para la ciudad de Jerusalén, y que muchas versiones bíblicas habían retirado un versículo del salmista que expresa “estoy harto de vivir con los que odian la paz”. Las relaciones sanas se fundamentan en la paz, por lo que una cultura adecuada de relaciones debe fomentar cuatro pilares que otorgan armonía a las interacciones humanas. Estos son la autoestima, la comunicación, la cooperación y la resolución y manejo de conflictos de manera no violenta. Es imposible edificar relaciones de paz sino nos queremos y respetamos, si no somos capaces de establecer puentes comunicativos adecuados, si dejamos de ser seres relacionales o creemos que somos tan suficientes que no necesitamos a nadie, y si vivimos imbuidos en la lógica del desquite y la competencia. En la manera en que seamos capaces de desarrollar estos aspectos positivamente, podremos ir concibiendo un mundo interior y exterior más constructivo y capaz de encontrar la paz en medio de los problemas, de establecer puentes en las rupturas y de confiar en que la violencia no es el camino adecuado.
La lógica de trabajo fue esta, las horas pasaron muy rápido esos días de reflexiones, pero salimos henchidos de buenas metas para alcanzar una buena cultura de las relaciones.